jueves, 29 de diciembre de 2016

La carrera sin fin

“Come rápido” “Apúrate en hacer tu tarea” “¡Que lento eres!” “¿Ya terminaste?” “Apúrate que no llegas a tu clase”…

A veces pareciera que vivimos en un mundo hiperactivo en el que los adultos estamos tan tomados por los estímulos y la velocidad que vamos perdiendo la capacidad de compartir con nuestros hijos sin interferencias ni apuros, sin necesariamente tener que "organizar un plan" para poder pasar tiempo juntos. Hasta los momentos de ocio se han convertido en una carrera sin fin…

Me pregunto, si nosotros mismos estamos tan acelerados, ansiosos y distraídos ¿cómo podemos transmitirles la calma necesaria a nuestros pequeños para que crezcan sin sentirse insatisfechos, ansiosos, y constantemente en la búsqueda de actividades que los hagan sentir completos?

En un mundo que cada día se mueve más rápido, que exige tener más logros, más estudios, más habilidades, ¿en qué momento les transmitimos la calma necesaria para disfrutar de ser niño?
El crecimiento es un camino largo que tiene sus propios tiempos y procesos imposibles de acelerar....


Minosha Casabonne
Psicóloga / Psicoterapeuta
Acunnare. Espacio para Padres

No hay comentarios:

Publicar un comentario