Imagen de |
Luego, pensemos ¿qué es lo que cotidianamente lo ayuda a tranquilizarse?, algunos niños necesitan que se les expliquen las cosas de manera breve y pausada para digerir la frustración, a otros les basta con que se les reconozca lo que están sintiendo y más bien las palabras los irritan más, otros necesitan un rato de descarga y una compañía tranquila y respetuosa hasta que logran calmarse, otros están en un momento de su vida en que lo que necesitan es un abrazo. Por lo general, la firmeza con cariño les viene muy bien casi siempre...
Cada padre, conoce a sus hijos y el momento de su vida y desarrollo en el que están, intentemos no perder la cabeza cuando nuestros pequeños la pierden y busquemos siempre esos espacios de calma que nos contienen a nosotros y a ellos.
Minosha Casabonne
Psicóloga - Psicoterapeuta
Miembro Fundador de Acunnare. Espacio para
Padres
No hay comentarios:
Publicar un comentario