lunes, 3 de marzo de 2014

Lo que "hay que hacer" y el juego


Un par de niños están jugando en el parque, resbalándose por el tobagán, columpiándose, jugando con la arena. Dos mamás (o nanas) los persiguen de rato en rato con una fruta o sándwich para que coman. Los niños abren la boca y comen pero no parecen muy interesados, se ven más concentrados en jugar. ¿Si tuvieran hambre no lo comunicarían de alguna manera?

Los adultos podemos estar más pendientes de lo que “hay que hacer”: cambiarles el pañal, llevarlos a bañar, prepararlos para salir, darles de comer, regresar a la casa…y pensamos que lo que pueda estar haciendo el niño no es tan importante como lo que “hay que hacer”. Lo que puede pasar, entonces, es que les ponemos la comida en la boca, los levantamos del suelo para cambiarlos o bañarlos, los cogemos de pronto para irnos, etc. Luego ocurre que el niño no quiere, no hace caso a lo que se le dice, llora, patalea…

Imagen de Ojodigital.com
En algunos casos podemos avisarles un rato antes lo que se va o tiene que hacer (ej. en 5 minutos vamos a (irnos, bañarte, cambiarte, etc.), en otros casos podemos esperar a que ellos vengan a nosotros y nos digan que necesitan ir al baño, que tienen hambre, que tienen frío…El momento de juego es muy importante para el niño, es un momento de aprendizaje, de diversión, de elaboración, de tranquilidad, de aprender a estar solo y de muchas otras cosas. Valoremos ese momento tan especial y confiemos en que nuestros niños tienen formas de comunicarnos lo que necesitan. A veces, lo que “hay que hacer” puede esperar un ratito…


Marian Alvarez-Calderón
Psicóloga Clínica – Máster en Trabajo Clínico y Salud Mental
Miembro fundador de Acunnare Espacio para Padres


No hay comentarios:

Publicar un comentario