miércoles, 26 de febrero de 2014

Los primeros días de cole


Estamos a una semana de iniciar el nuevo año escolar. Para muchos niños esto puede ser motivo de ilusión y alegría de reencontrarse con sus amigos y maestros, así como de retomar actividades que quizá tuvieron que suspender durante las vacaciones. Sin embargo, también es probable que sientan otras cosas: Tristeza de que se acaben las vacaciones y de dejar su casa; ansiedad o preocupación por el encuentro con profesores nuevos y con un grupo de compañeros de clase distinto al del año pasado, temor a las exigencias y retos escolares del nuevo año....

Imagen de Sheknows.com
Para otros niños puede que éste sea su primer año de colegio y que, por ende sientan mucha incertidumbre acerca de esta nueva experiencia. Sin embargo hay cosas muy concretas que los padres podemos hacer para ayudarlos a irse familiarizando con la situación y que así lleguen al primer día de clases con más tranquilidad. Algunos ejemplos son: Llevarlos a conocer el colegio y los salones de clases y contarles cómo será (a groso modo) su día a día cuando esté ahí, jugar un rato con ellos en el lugar del recreo, que participen con nosotros en la compra del uniforme y útiles escolares; si es posible, llevarlos a conocer a algunos compañeros de su promoción o a algún maestro y finalmente, si el colegio lo permite, llegar temprano para poder acompañarlos un rato los primeros días de clases.

Digerir las situaciones nuevas es un proceso, por ello vale la pena que los padres nos demos el tiempo y el espacio de conversar con nuestros hijos acerca de cómo se sienten respecto a la incertidumbre que un nuevo año siempre trae consigo. Cuando les damos a los niños la posibilidad de compartir con nosotros aquello que sienten y piensan los estamos ayudando a digerir las experiencias nuevas, a que se sientan acompañados en ellas y facilitando que se entreguen a vivirlas con mayor tranquilidad y libertad.

Minosha Casabonne
Psicóloga y Psicoterapeuta
Miembro Fundador de Acunnare. Espacio para Padres

jueves, 6 de febrero de 2014

Mami ¿cómo se hacen los bebés?


"Mami, papi ¿cómo se hacen los bebés?, ¿cómo salen de las barrigas de sus mamás?"  

Para algunos padres éstas pueden ser preguntas muy incómodas que prefieren evadir. Sin embargo, los niños hacen estas y otras preguntas con mucha naturalidad y esperan que se las contestemos de la misma forma, sin mayores clases de anatomía ni cuentos complicados, finalmente ellos ya tienen algunas hipótesis acerca del tema para el momento en el cual llega "la pregunta". Lo que ellos buscan es que les demos respuestas sencillas que respondan solamente a lo que están preguntando, no más. Libros de cómo hablarles a los niños de sexo hay muchos, sin embargo estos contienen muchísima información que por lo general va mucho más allá de lo que el niño desea saber en ese momento. Por otro lado, al recurrir inmediatamente al libro nos estamos perdiendo de preguntarles nosotros a ellos algo muy importante que es "¿y tu que piensas?" y así abrir la posibilidad de un intercambio que nos permita ir acogiéndolo y respondiéndole de acuerdo a lo que él está necesitando saber y en su propio lenguaje.


Imagen de www.tuvozesvida.com 
En líneas generales, cuando nuestros hijos nos preguntan acerca de cualquier tema, y este no es una excepción, necesitan primero que los escuchemos y luego que les demos la información muy pero muy digerida, de lo contrario, se quedan "empachados y confundidos" con nuestras respuestas. Aquello que nos suena demasiado sencillo y básico a los adultos puede ser suficiente para ellos y, en todo caso, si necesitan más nos lo irán haciendo saber en la medida en que nos noten receptivos y abiertos a sus inquietudes. Lo importante es no adelantarnos sino ir a su ritmo. Y tener siempre en mente que algo fundamental que los niños necesitan saber es que un hijo (y esto lo incluye a él) es producto del amor entre sus padres, incluso si luego dejan de estar juntos como pareja, en algún momento si lo estuvieron...

Minosha Casabonne
Psicóloga y Psicoterapeuta
Miembro Fundador de Acunnare. Espacio para Padres



lunes, 3 de febrero de 2014

Hablemos sobre cuentos...


La lectura de cuentos es una tradición que ha sido pasada de generación en generación. Nuestros abuelos, nuestros padres, nosotros mismos…todos hemos escuchado en algún momento sobre la importancia de leerles cuentos a nuestros hijos. Pero ¿realmente son tan importantes? ¿Realmente debemos tomarnos 20 o 30 minutos leyéndoles cuentos a nuestros hijos?  Conversemos un poco más al respecto.

Estamos acostumbrados a oír sobre cómo los cuentos desarrollan su vocabulario, su memoria, sobre cómo si les leemos muchas veces respecto de los animales, nuestros hijos aprenderán acerca de ellos. Esto es muy cierto, sin embargo, hay algo más al respecto de la lectura de cuentos que no siempre nos cuentan:  la magia.

Imagen de NJC Family
¿Qué valioso sería el momento del cuento si lo tomamos como un espacio íntimo entre nuestros hijos y nosotros, no? Qué importante es si lo tomamos así para el desarrollo de ellos. Los niños disfrutan pasando tiempo con sus padres y más aún cuando estos los llevan a un mundo de fantasía, donde los animales hablan, los adultos lloran y donde cualquier cosa que ellos deseen puede pasar. Convirtamos este momento en un espacio en donde se dejen de lado los teléfonos, las preocupaciones y los deberes, donde tanto el padre como el hijo viajen a un mundo de sueños, en donde tanto el padre como el hijo se emocionen con la historia. De seguro este momento se convertirá en uno de sus recuerdos más preciados de la infancia y de su relación con sus papás. Es en ese preciso momento en donde ocurre la magia.

Ambos entran a un mundo paralelo donde todas las emociones son válidas: la felicidad, la tristeza, el dolor y el miedo. Nuestros hijos se sentirán tan identificados con algunos personajes y algunas de sus emociones que probablemente nos pidan volver a leerlos.  Esos minutos donde nuestros hijos disfrutan leyendo una y otra vez el mismo cuento nos demuestra que están procesando y entendiendo muchas cosas de ellos mismos.

Ustedes se preguntarán ¿Pero cuáles son los cuentos correctos? Pues no hay una respuesta definitiva a esto, pero sí hay diversas preguntas que debemos hacernos antes de leérselos ¿Es adecuado para la edad de mi hijo? ¿A mi hijo le gustan estas imágenes? ¿La historia que cuenta va de acuerdo a nuestra manera de pensar?

Dentro de un amplio rango de cuentos, queremos ofrecerles algunas opciones que puedan disfrutar tanto los padres como los chicos al leerlos. Esperemos que emprendan juntos un maravilloso viaje en donde descubran que todos nuestros deseos, anhelos y miedos son posibles.

- Cocodrilo va al dentista de Taro Gomi
Imagen de Anthony Browne
- Cosita linda de Anthony Browne
- Mi papá  de Anthony Browne
- Mi mamá de Anthony Browne
- El mundo al que vienes de Carmen Queralt
- Al galope de Ruffus Buttler
- Me gustan los libros de Anthony Browne
- Tengo una mascota de Graciela Repun
- El viaje de Lisa de Paul Maar
- ¿Qué es el amor ? De Davide Cali y Anna Laura Cantone
- Cambios de Anthony Browne
- Los mejores días de Heinz janisch y Helga Bansch
- El osito polar de Hans de Beer
- Cuando el Elefante camina de Keiko Kasza
- Perdido y encontrado de Oliver Jeffers
- ¿Cómo atrapar una estrella? de Oliver Jefffers
- Arriba y Abajo de Oliver Jeffers
- Willy el Soñador de Anthony Browne

¡¡Y colorín colorado este cuento se ha acabado!!


María del Pilar Vicente 
Psicóloga Clínica